Cómo saber si tienes piojos

Cuando tenemos hijos es frecuente que al llegar a cierta edad tenga piojos, e incluso en algunos casos nosotros los adultos podemos tenerlos también. Incluso, en algunas ocasiones podemos confundir los síntomas con una fuerte caspa o con una ligera picazón, para salir de dudas debemos saber cómo distinguir si tenemos o no tenemos estos animalitos en nuestro cuerpo y así poder atacarlos con debido tiempo.

Lo primero que debemos saber es que los piojos son unos pequeñísimos insectos del tipo parasito que se alimentan de la sangre. Estos se multiplican con mucha facilidad. Existen piojos capilares (que están en el cuero cabelludo), del cuerpo (que viven en la piel y en la vestimenta) y los piojos púbicos (que aparecen en la zona púbica cerca de los genitales).

¿tengo piojos?

Los piojos en el cuerpo suelen darse en personas de poca higiene, como los indigentes, y son muy poco frecuentes, al igual que los piojos en el vello púbico. Los más frecuentes suelen ser los piojos capilares tanto en la niñez como en edad adulta. Tanto así que casi todos hemos tenido piojos en el cabello por lo menos una vez en la vida.

¿Cómo saber si tengo piojos?

Cuatros señales que nos dicen que tenemos piojos:

La forma más fácil de detectar que tenemos piojos es estando atentos a los siguientes indicadores de nuestro cuerpo:

1, Picazón aguda: la forma más fácil es verificar si nos pica mucho la cabeza, o cualquier otra parte donde pueda haber piojos.

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2, Puedes sentir una sensación de hormigueo cuando te tocas el cabello o cuando ligeramente lo mueves.

3, En algunas ocasiones estos síntomas pueden confundirse con la caspa o algún tipo de hongo, así que se hace necesario verificar directamente la presencia de los piojos. Revisar el cuero cabelludo o cualquier otra parte del cuerpo. Los piojos adultos pueden tener el tamaño de una semilla de ajonjolí, mientras que las liendres (huevecillos de piojo) son tan pequeños que pueden ser confundidos con la caspa, tienen un color blanco o entre amarillo y marrón. Normalmente se pueden encontrar en el cuero cabelludo, detrás de las orejas, la nuca o la coronilla de la cabeza. Con un peine de púas finas se puede tratar y a la vez verificar la presencia de las liendres en el cuero cabelludo.

4, La presencia de protuberancias en el cuero cabelludo como en otras partes del cuerpo puede indicar a simple vista la presencia de piojos, estas marcas rojizas son señal clara de que se han estado alimentando y con toda seguridad multiplicándose.

Como prevenir los piojos

Los piojos llegan a nuestra cabeza por medio del contacto con otras personas. Es un mito que se produzcan por el contacto con ciertos objetos como ropa, sabanas u almohadas. En caso de saber que algunas personas tienen piojos (como nuestros hijos) mantener cierta distancia entre nuestras cabezas para no ser víctimas de ellos.

Existen repelentes como el IR-3535 que es un biopesticida eficaz para estos casos, como también tenemos el octanediol que no tan solamente funciona como repelente sino también como un asesino de piojos y liendres, así que este último es la mejor opción antes o durante de tener piojos.

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En algunos casos será casi imposible prevenirlos, como, por ejemplo, el caso de los niños, es muy difícil puesto que van a la escuela y allí tienen todo tipo de contactos con otros compañeros de clases, además que es la edad en la que son más propensos a los piojos. Para estos casos nos quedamos con la opción del tratamiento.

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Como eliminar los piojos

En ocasiones, luego de detectar la presencia de piojos, algunas personas pueden pasar semanas y hasta meses con estos animalitos recorriendo la cabeza. La razón es sencilla: no se usa el tratamiento de forma adecuada.

Lo primero que debemos tener es un peine de púas finas llamada liendrera, el cual será nuestra primera arma, cuando lo tengamos a la mano hacemos lo siguiente: tomamos el cabello, preferiblemente mojado porque así los piojos se mueven menos, vamos dividiendo el cabello por zonas, y vamos pasando el peine poco a poco observando los piojos o las liendres que van saliendo del cabello. Las zonas que ya hemos revisado las apartamos con alguna goma o horquilla.

Luego de haber hecho el trabajo manual pasamos a los fármacos. Aparte del octanidol que ya mencionamos anteriormente, tenemos otros fármacos como la permetrina (para niños mayores a dos años), que suele combinarse con butoxido de piperonilo para mejor efecto. Para este tratamiento se debe tener cuidado, puesto que se debe estar muy seguro de la presencia de piojos y liendres para aplicarlo, de lo contrario puede ser contraproducente.

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Si la permetrina no da resultados, se recomienda Dimeticona y Ciclometicona que es un poco más agresivo con el insecto. Puede ser usado por niños mayores de un año, embarazadas y mujeres durante lactancia.

Si hacemos correcto uso de estos pasos podemos decir ¡Adiós piojos!

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