Son muchas las enfermedades que pueden afectarnos en cualquier momento. Y de allí la importancia de los chequeos médicos regulares. Sin embargo, antes de visitar al médico puedes investigar un poco en internet o mediante otras ayudas, a fin de comparar los síntomas que tengas con los de alguna enfermedad. En este artículo hablaremos particularmente de la endometriosis.
¿Qué exámenes se hacen para detectar endometriosis? ¿Qué tipos de endometriosis hay? ¿Hay alguna cura para esta dolorosa enfermedad? Vamos a responder a continuación estas y otras preguntas a fin de darte la mayor ayuda posible.
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¿Qué exámenes se hacen para detectar endometriosis?
Detectar una endometriosis es muy importante para saber cuál será el tratamiento a seguir. Para salir de toda duda es necesario que lleves a cabo uno de los exámenes recomendados por los médicos, especialmente los ginecólogos.
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Veamos cuáles son.
Ecografías. Es utilizada como herramienta para descartar la existencia de endometriosis. Con las ecografías se realiza una evaluación completa de la zona pélvica. Son evaluaciones de gran calidad en lo relacionado con la resolución de las imágenes tomadas por lo que permite examinar detalladamente el útero a fin de saber si el paciente tiene esta enfermedad.
Resonancia magnética. Este proceso permite ver imágenes de gran calidad a fin de que los médicos puedan determinar si el tejido que debe estar por dentro del útero esta por fuera, o en otras palabras, que existe endometriosis en el paciente.
En el caso de este proceso hará falta una pequeña invasión en el área del útero. En ese lugar se ingresa el instrumento que permite iluminar y revisar la zona. Este es un procedimiento que debe ser realizado por un médico experto, pues solo así sabrá usar el instrumento para obtener las imágenes necesarias.
Conocer todo lo que puedas sobre este tema es la mejor recomendación que podemos darte. Uno de los detalles más importantes tiene que ver con los tipos de endometriosis que existen. Así podrás comparar los síntomas que tienes, si es que los tienes, con los de cada uno de los tipos. La clasificación dependerá de lo extendido que esté en el cuerpo. Veamos a continuación los 3 tipos principales de endometriosis que existen.
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Endometriosis superficial
Como su nombre nos lo indica, se trata del tipo más leve de esta enfermedad. Por tanto, hablamos de que esta clase de endometriosis se ve reflejada en los ovarios de manera superficial. Sin embargo no por eso deja de ser importante que busques ayuda médica si presentas los síntomas.
Endometriosis ovárica
En el caso de esta clase de endometriosis, abarca un poco más de espacio que la clase superficial y puede reconocerse por su aparición en la zona del útero y las trompas. Por lo general, son de color marrón oscuro muy parecidos al color del chocolate.
Endometriosis profunda
Es el tipo de endometriosis más serio que existe. Esto se debe sobre todo a que no solo afecta la zona pélvica, sino que puede extenderse a órganos vitales que se encuentran cerca. Su forma es parecida a pequeños granos formados por el tejido que debería estar dentro del útero.
Adicionalmente debemos señalar que existen otros tipos de endometriosis: rectal, intestinal y peritoneal. Cada uno posee su nombre debido a la zona donde aparece el tejido endometrial. En el caso de estos 3, el tejido es el mismo y los síntomas muy parecidos.
Esta enfermedad también es catalogada por grados, usando los números romanos del 1 al 5, yendo de menor a mayor en gravedad. Y es de esa manera que se le comunica al paciente, dependiendo cuan avanzada esté la enfermedad. Gracias a esa forma de catalogarse, puedes determinar qué grado de endometriosis puedes tener. Veamos dos formas de hacerlo.
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En primer lugar, puedes tomar nota de los síntomas que se presentan de forma regular, especialmente durante el periodo de menstruación. Luego debes comprobar los síntomas con la lista de cada uno de los síntomas que se presentan con cada grado de la endometriosis. Presentamos cuáles son algunos de los síntomas:
Fuertes dolores. Dolor intenso en la zona abdominal, también al tener relaciones sexuales e incluso a la hora de evacuar las heces.
Otros síntomas fuertes. También es posible que experimentes síntomas como vomito o nauseas, así como poca fuerza en el cuerpo. Incluso puede que sientas mareos.
Si tienes todos estos síntomas, es probable que tengas endometriosis. Pero, como de seguro quieres confirmar el padecimiento y el grado de avance, es necesario que visites a un ginecólogo de confianza para que te realice alguno de los exámenes recomendados. Solo así podrás asegurarte de cuál es el verdadero resultado así como el tratamiento que debes seguir.
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¿Cuál es la cura para la endometriosis?
Aunque quisiéramos decirte que hay una cura para la endometriosis, lamentablemente, y gracias a la opinión médica profesional, no es así. Aunque algunas personas especializadas han llegado a afirmar que se podía curar definitivamente, la realidad es que la comunidad médica en general concuerda en que al menos por ahora, no es posible curarla por completo.
Pero, la buena noticia es que ya existen varios tratamientos para ayudar a los pacientes a disminuir el efecto negativo de los síntomas de esta enfermedad. Entre estos podemos mencionar la terapia a base de hormonas, el uso de medicinas para lograr que el dolor disminuya, así como las cirugías. Sin embargo, es necesario señalar que esta última alternativa no es tan recomendada, especialmente si ya ha avanzado al grado 2 o superior.
¿Se puede curar la endometriosis naturalmente?
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La medicina tradicional no puede curar la enfermedad por completo y, aunque algunos no quieran admitirlo, la medicina natural tampoco puede hacerlo. Sin embargo, sí existen tratamientos que pueden ayudar a mejorar la salud del paciente de manera considerable. Veamos algunos de estos remedios caseros.
En la mayoría de los casos se tratan de tratamientos herbales de plantas provenientes de China.
Básicamente este tratamiento es usado para aliviar el dolor en cualquier zona del cuerpo, incluyendo la zona de la pelvis.
Tener esta enfermedad o cualquier otra, no es para nada halagador, pero como recomendación podemos decir que en mayor grado las mejoras que puedas tener se relacionan directamente con la buena actitud que tengas para hacerle frente. En otras palabras, una actitud positiva contribuye a sobrellevar mejor la enfermedad.
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NOTA LEGAL: Este post es meramente informativo (basado en lo que hemos podido leer), si necesitas asistencia personalizada consulta a un profesional especialista en la materia.
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