La vista es uno de los sentidos de nuestro cuerpo que al igual que los demás puede variar con el tiempo. Comprobar si necesitas gafas o lentillas te permitirá alargar la vida útil y buen funcionamiento de tus ojos.
Y es que pocas veces nos damos cuenta en qué momento empiezan a aparecer defectos refractivos oculares.
Cuando ocurren cambios en la dirección de los rayos de luz que pasan a través de la retina, provocando problemas para enfocar las imágenes que percibes se habla de errores de refracción.
En lugar de acudir regularmente a una revisión óptica lo que hacemos es forzar aún más la vista y el cerebro se adapta a las deficiencias visuales.
También, tenemos la creencia de que usando gafas nos acostumbramos a ver mal, cuando lo cierto es que al no usarlas provocamos una fatiga ocular que a largo plazo puede generar problemas graves de discapacidad visual.
Si tienes dudas de cómo estás distinguiendo el mundo que te rodea, prueba primero si la visión de ambos ojos es la misma cerrando primero el derecho y luego el izquierdo.
Después evalúa los consejos que te damos a continuación y ten en cuenta que nadie mejor que un optometrista para que te haga una adecuada evaluación.
Signos que pueden indicar un problema refractivo en los ojos
- Ver las letras borrosas al leer a cualquier distancia, ya sea de lejos o de cerca, instándote a hacer un esfuerzo visual para lograr enfocar adecuadamente lo que estás visualizando y ver bien los detalles.
- Visión doble o aparición de halos de luz alrededor de los objetos.
- Mareos o cefaleas constantes que se intensifican tras horas leyendo, viendo el móvil o delante del ordenador, lo que surge al forzar la vista y afectar el sistema neurológico.
- Dificultad para ver en la noche o a poca luz.
- Entrecerrar los ojos para poder enfocar mejor las imágenes recibidas, lo cual se hace para dejar entrar menos luz y que los objetos se vean un poco mejor. Al hacer este gesto fuerzas la pupila, lo que a su vez ocasiona otros problemas oculares como la presbicia.
- Resequedad, picazón o enrojecimiento en los ojos, indicando fatiga visual.
- Una consecuencia poco común cuando existen problemas oculares que deben también tomarse en cuenta es la aparición de orzuelos en los párpados, que a su vez se debe a la obstrucción de las glándulas lacrimales. Este contratiempo tiene otros factores como el estrés, cambios hormonales o infecciones favorecidas por ambientes húmedos.
Problemas relacionados a los defectos de visión
No todos los problemas que nos permiten enfocar bien tienen el mismo origen, unos se deben a la longitud del globo ocular, otros a la forma de la córnea o quizás pudieran ser ocasionados por el envejecimiento del cristalino.
Un profesional te indicará si una terapia a base de ejercicios es lo mejor en tu caso o si lo que debes hacer es usar gafas o lentes de contacto.
Lo más recomendable es realizar un chequeo una vez al año. Esto te permitirá prever patologías graves específicas asociadas a lesiones en el nervio óptico, que aparecen cuando existe una presión ocular elevada (glaucoma), o cuando vas perdiendo la vista con el paso de los años (degeneración macular, DMAE / DME).
Entre los defectos que acompañan algunos problemas de visión están:
Miopía
Se caracteriza por una mala visión de lejos y es el más común entre los jóvenes porque aparece entre los 7 y 17 años de edad, cuando nos damos cuenta de que tenemos que forzar la vista al ver el pizarrón.
Puede traer consigo problemas graves como desprendimiento de la retina e incidencias de glaucoma y cataratas. A una miopía que supera el grado seis se le llama miopía magna.
Hipermetropía
Es un defecto del cristalino del cual nos damos cuenta cuando solemos entrecerrar los ojos para enfocar mejor las letras y los objetos.
Aparece en la edad adulta y ocurre cuando no podemos ver bien los las imágenes cercanas a nosotros.
Astigmatismo
Es un problema presente cuando el ojo no puede enfocar bien, ya sea de cerca o de lejos, lo que causa una visión borrosa o distorsionada.
Es recomendable en este caso el uso de gafas, sin embargo algunos expertos opinan que no suele variar ni empeorar al paso del tiempo.
Presbicia
Proceso de envejecimiento del ojo que se da a partir de los 40 años de edad y que notamos cuando empezamos a alargar el brazo para poder ver de cerca.
Suele compensarse con gafas monofocales, bifocales o progresivas, aunque en algunos casos los lentes de contacto funcionan bastante bien.
Daltonismo
Ocurre cuando no puedes diferenciar bien los colores. Esta confusión puede darse entre los tonos verdes y rojos o –incluso- no existir distinción cromática.
Preguntas y respuestas que surgen cuando necesitas usar gafas
Estas son algunas de las dudas más frecuentes que tienen muchos usuarios que no saben si necesitan usar o no gafas.
¿Qué debo considerar antes de comprar gafas?
- Frecuencia de uso. Solemos pensar que las gafas solo debemos usarlas al leer, pero por lo general su uso debe ser cotidiano o para evitar que varíe su graduación, en especial en casos como la miopía.
- Durabilidad de la fórmula. Para esto es importante realizar los chequeos anuales, estos te permitirán saber la vida útil de tus gafas o si debes cambiar la fórmula de sus cristales.
- Estilo y morfología. Esto dependerá de tu personalidad, la forma de tu rostro, tono de piel y tamaño de tus ojos, lo que te permitirá escoger la montura que vaya mejor contigo.
¿Qué ocurre cuando quiero usar gafas y no los necesito?
Las gafas mal graduadas pueden generar un esfuerzo innecesario que en niños y adolescentes puede terminar perjudicando la visión o agravar daños ya existentes, ocasionando otros problemas como mareos o dolores de cabeza.
Sin embargo, puedes utilizar lentes de descanso, sin medida, con tratamiento antireflex, si lo que deseas es prevenir o disminuir la fatiga visual, común cuando estamos frente al ordenador.
¿Qué tipo de gafas existen?
Los tipos de gafas que puedes necesitar son:
- Monofocales
- Bifocales
- Progesivas
Están las que tienen una sola graduación en los cristales de las gafas llamadas monofocales.
También las que tienen más de una graduación, es decir que poseen por ejemplo un cristal para ver de lejos y otro para ver de cerca, llamadas bifocales.
Y otras que se adaptan para ver de cerca de lejos, llamadas progresivas.