Este tema es bastante complejo, pues podría pensarse que el valor de un cuadro, es un asunto meramente subjetivo. Una persona común podría preguntarse ¿Cómo esa obra con esas manchas y vetas de pintura que no se entienden (refiriéndose a una obra abstracta) pueda tener algún valor?
Quizás te han obsequiado o has comprado un cuadro porque hace juego con tus muebles y dirás que es una hermosura y seguramente, sin duda lo es. Hay cuadros decorativos que tienen apariencia agradable, pero esto no significa que tengan un valor como el que puede tener una obra de arte, sea está muy agradable a la vista (o no).
[adinserter block=»5″]Esta pregunta obviamente estaría formulada por un total desconocedor de la historia del arte y de lo que pudo significar determinada pintura para la evolución en el debate sobre qué es el arte, cuyo concepto es muy difícil de precisar a pesar de múltiples estudios a través del tiempo.
En primer lugar, para pensar en que un cuadro tiene un valor en sí mismo, no es necesario tener estudios académicos relacionados con las especialidades artísticas, sino que hay que tener cultivada la sensibilidad estética. Esta es la clave para comprender, aunque sea de manera empírica, que un cuadro es bueno o no lo es.
Cómo saber si un cuadro tiene valor
[adinserter block=»5″]Son muchas variables las que pueden determinar si un cuadro tiene un valor monetario o no y para decidirlo, hay que hacer un análisis crítico y concienzudo que conduzca a la respuesta más acertada. Veamos a continuación las principales orientaciones para tal fin.
En qué año fue realizada o datada la obra
La fecha te dará una excelente pista para saber si el cuadro pertenece a un momento histórico particular, un movimiento artístico importante o si ello le da el carácter de antigüedad y es un objeto coleccionable.
Estos factores le agregan un valor que debes considerar. Una obra que quizás está polvorienta o desteñida, podría tener un valor muy alto, si responde a estas variables mencionadas.
Originalidad de la obra
[adinserter block=»5″]La mejor forma de saber si una obra es original, es que posea un certificado de autenticidad. Las pruebas de que la obra es legal y no es una burda copia, es muy importante. Si compras un cuadro a sabiendas de que es una copia y no te importa, porque lo que deseas es tener la réplica como objeto decorativo, está muy bien, o sí vas al mercado negro del arte, donde sabes muy bien qué hay de todo, especialmente que quienes se dedican a ello, son truculentos en su mayoría, corres muchos riesgos.
Ellos negocian las obras a precios dramáticamente por debajo del valor de una obra de arte, pues saben que hay sospechas de que la obra que no es auténtica, que tiene irregularidades en su historial, o que no posee ninguna documentación que la avale. En este caso, si coleccionas eres un especialista en materia del arte y deseas adquirir un cuadro por su valor histórico, no debes comprarlo a través de estos medios.
Solicita el análisis y el certificado a un tasador profesional.
No te conformes con ver la firma, es importante que la misma sea revisada por un especialista, pues se conocen casos de falsificaciones muy bien hechas, que pueden engañar a cualquiera a primera vista.
Como saber si un cuadro es valioso consejos
[adinserter block=»5″]Aquí te dejaremos una serie de interesantes tips que podrán orientarte cuando estés frente a un cuadro, que te pertenece o que deseas adquirir y no tienes claridad si el valor que estipula el vendedor es el justo, de acuerdo al valor verdadero del mismo.
- Seguir los registros que se llevan en las subastas públicas (vía online o en catálogos impresos)
- Debes precisar a qué estilo pertenece la obra y la técnica que empleó el artista para su realización.
- Comparar con obras similares, es muy útil, porque así tienes una visión más amplia que te permita establecer relaciones y comparaciones en pro de una justa valoración.
- Consultar a un galerista porque estas personas tienen contacto directo con el quehacer artístico, y tienen una percepción más acertada de todo lo inherente al arte y su valor.
- Acudir a marchantes y casas de subastas especializadas, porque ellos saben cómo se mueve la compra venta en este medio.
- Conocer la demanda es decir si otros están interesados en el cuadro, este dato permite saber si la obra es de interés de muchos o de nadie. Si es de muchos, hay que ver qué criterios impera en ellos para poner sus ojos en la obra.